Opinion: El Proyecto 2025 es un Desastre Nuclear para Nevada 

Durante décadas, un tema ha unido a los políticos de Nevada a nivel local, estatal y federal: Yucca Mountain. La mayoría de los habitantes de Nevada creen que desarrollar Yucca Mountain como un vertedero nacional de desechos nucleares es un tema muerto. Sin embargo, el preocupante manifiesto del Proyecto 2025 de la Fundación Heritage y exfuncionarios de Trump pide su resurgimiento.

Si el expresidente Donald Trump y su compañero de fórmula, el senador JD Vance, ganan las próximas elecciones, su Proyecto 2025 podría traer de vuelta las pruebas de armas nucleares en Nevada y revivir el sitio de desechos nucleares de Yucca Mountain. Aquí está el porqué los nevadenses deberían estar preocupados.

Yucca Mountain fue elegida como sitio de almacenamiento de desechos nucleares en 2002, provocando controversia desde entonces. Gracias al fallecido senador Harry Reid, el proyecto se detuvo en 2009. Ubicado a solo 90 millas de Las Vegas, muchos locales temen los riesgos de almacenar desechos radiactivos allí.

Trump ha cambiado de opinión sobre Yucca Mountain, mostrando tanto apoyo como oposición en diferentes momentos. Ahora, con la posibilidad de su regreso a la presidencia, la incertidumbre sobre Yucca Mountain está de vuelta. 

El Proyecto 2025 — la plataforma conservadora redactada por los aliados de Trump y Vance en la Fundación Heritage — sugiere revisar los planes para Yucca Mountain, potencialmente reiniciando los esfuerzos para usar el sitio. Además, el candidato al Senado Sam Brown también ha cambiado de opinión sobre este tema, destacando su desconexión con los votantes de Nevada.

Almacenar desechos nucleares en Yucca Mountain presenta muchos riesgos, incluidos los problemas geológicos y el peligro de transportar materiales peligrosos. Nevada ya está involucrada en varias batallas legales sobre el sitio, lidiando con derechos de agua y problemas de seguridad.

El gobernador Joe Lombardo y otros líderes estatales se oponen al plan. La mayoría de los habitantes de Nevada no quieren que su estado sea el vertedero de desechos nucleares de la nación. Los costos y los problemas legales hacen que Yucca Mountain sea una venta difícil.

El Proyecto 2025 también propone reiniciar las pruebas de armas nucleares en el Sitio de Seguridad Nacional de Nevada, donde la última prueba nuclear subterránea ocurrió en 1992. Reanudar las pruebas podría plantear riesgos ambientales y de salud y escalar las tensiones nucleares globales.

El Proyecto 2025 incluso sugiere retirar el apoyo al Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares, que busca detener todas las explosiones nucleares. Mientras algunos argumentan que las pruebas son necesarias para mantener el arsenal nuclear seguro y confiable, la tecnología moderna ofrece otras formas de lograr esto sin detonaciones reales.

Revitalizar Yucca Mountain y las pruebas nucleares se siente como un paso atrás. La conversación nacional debería centrarse en hechos científicos, protección ambiental y salud pública. Necesitamos soluciones inteligentes y seguras, no arriesgadas y anticuadas.

El camino a seguir para Nevada y la nación requiere una deliberación cuidadosa y un compromiso con soluciones sostenibles y seguras para gestionar los desechos nucleares y mantener la seguridad nacional. La revitalización de Yucca Mountain y las pruebas nucleares bajo el Proyecto 2025 representa un posible regreso a políticas anticuadas y peligrosas que han sido correctamente consignadas a la historia. 

Los habitantes de Nevada, con su perspectiva histórica única y batallas legales en curso, son una voz crítica en este debate. La conversación nacional más amplia debe priorizar la evidencia científica, la seguridad ambiental y la salud pública sobre maniobras políticas expeditas. Al contemplar el futuro de la política nuclear en América, es imperativo atender las lecciones del pasado y forjar un camino que realmente sirva al bien común.

Como nevadenses, necesitamos decir ¡NO! al Proyecto 2025 y Yucca Mountain. Las propuestas nucleares son peligrosas para nuestro estado y nuestros residentes. Necesitamos hablar con una voz singular y votar para mantener el estilo de vida de Nevada.